Así es Llorenç Tomás, el balear que quiso sorprender a los ‘bichos’ en el keirin, tras haber sido campeón en la persecución por equipos

Todavía tengo en mi retina uno de los momentos más espectaculares e inesperados de los recientes Campeonatos de España: el decidido y valiente ataque de Llorenç Tomás en la final de keirin, cuando aún quedaban dos vueltas y media para el desenlace. El balear quiso jugar la baza de la sorpresa y le faltó poco más de media vuelta, cuando fue cazado, pero pudo mantener la velocidad -y el coraje- para subir al podio a recoger la medalla de bronce.

Agachado, primero por la izquierda, con sus compañeros 
de la selección balear. Twitter Jaume Mas

“De joven era velocista, pero ahora ya no tengo la potencia que tienen mis rivales. Por eso tengo que buscar sorprenderles. Lo tenía pensado para la clasificatoria, pero lo hizo otro corredor, pero no le valió. Afortunadamente Alejandro Martínez me pasó muy rápido, vi que podía ponerme a su rueda y me clasifiqué para la final, que era mi objetivo”.

Pero las ambiciones del mallorquín no terminaron ahí. “Diez minutos antes de salir en la final todos me decían lo mismo. Jaume (Mas), Toni (Tauler), Miquel (Alzamora)… Que el sexto puesto ya lo tenía y que tenía que probarlo, a ver si podía dar la sorpresa. En el vídeo se ve que al principio solo hice una aceleración, como que me lo pienso un poco, para no poner sobre aviso a los rivales. Pero luego ya abrí gas y hasta que resistí”.

Una medalla de bronce que pudo ser plata, ya que el Colegio de Árbitros estuvo sopesando descalificar al segundo, al madrileño Esteban Sánchez. “No vi lo que pasó, porque iban por detrás, pero yo me doy más que satisfecho con el podio”. De hecho, “el jueves cuando llegamos no sabía lo que iba a correr, aparte de la persecución por equipos. No había nadie para el keirin y es una prueba que me gusta. Aunque ya no muevo los mismos vatios, y no tengo nada que hacer contra estos ‘bichos’, quería aprovechar que estábamos ahí y que no tenía ya nada más que correr”. Y que desde luego, alegró tanto al propio corredor como a sus compañeros de selección e incluso a su paisano Albert Torres, felicitándose al borde de la pista como se ve en el vídeo.


Aparte del bronce, Tomás fue uno de los integrantes de la cuarteta balear que se llevó el oro. “La idea es que Sergi (Amengual) hiciera la clasificatoria y yo corriera la final. Los dos tenemos un poco más de punch para la arrancada, que es lo que se lleva ahora y la idea era salir rápido a ver si podíamos terminar pronto y no alargar el esfuerzo. Hice tres vueltas y luego una cada compañero y cuando me quité terminamos doblando a Valencia”.

En pleno ataque... Foto Pedro Jiménez/DStrel Cycling

En este caso Tomás, sí contaba con la medalla de oro. “Es la prueba que más hemos estado preparando para estos Campeonatos, con un trabajo muy enfocado con la cuarteta. De hecho, el manillar de puntos casi ni le he usado en las semanas antes. Para mi este título significa mucho, porque sé cuál es mi nivel, y tenemos tres grandes corredores y Amengual estará con ellos cuando termine de creer en sus posibilidades. Los números no engañan, pero tengo experiencia de 15 años y sabía lo que podía aportar. La persecución era un gran objetivo para todos, comenzando por Jaume Mas, y sabíamos que podíamos ganar, aunque teníamos que trabajarla para no tener sorpresas. Nos han salido los tiempos, pero tampoco ha sido un paseo”.

El éxito del mallorquín es un buen momento para conocer a este corredor, de 32 años –“ya soy master”, bromea- que siempre había destacado en las pruebas locales, tanto en pista como en carretera, y que nos dice que “por mi trabajo, no puedo dedicar veinte horas a la semana a entrenar, pero tengo la suerte de poder compatibilizarlo con mi afición”. Y nos explica que es pedagogo, que trabaja con una ONG centrada en personas con discapacidad “en un proyecto para ver si podemos hacer un ‘delivery’ con estas personas, y que va por muy buen camino”.

--- y después del mismo.  Foto Pedro Jiménez/DStrel Cycling

Por esta vinculación, le preguntamos si no pensaba tener protagonismo en el  paraciclismo y nos cuenta una anécdota. “Hace unos meses, el seleccionador balear me llamó por si quería hacer de piloto, con Joan Sansó. La verdad es que me hacía mucha ilusión, porque mi padre fue también conductor en tándem. Pero tuve un problema en el ojo, con un trasplante de córnea con rechazo, con problemas de fotosensibilidad y no pude aceptar. Y luego Joan tuvo la suerte de encontrar a Fran (Rus), que tiene mucho más nivel que yo”.

Y de cara al futuro lo tiene claro. “Soy realista y sé donde puedo estar. Si la selección quiere contar conmigo, estaré encantado. Si no, aprovecharé para entrenar y correr aquí, que tenemos el mejor velódromo de España, sabiendo que la insularidad es un inconveniente y que tampoco tengo muchas opciones de competir fuera”.

1 comentario:

  1. Llorenç es un corredor que a todos nos gusta tener en nuestro equipo, comprometido, siempre positivo y ayudando a quien le haga falta, un 10 como persona y como corredor, para mi, un gran descubrimiento, emocionado de verle con su maillot que se lo ha trabajado como el que mas, y orgulloso de que todo el equipo estuviera pendiente de el, gràcies Llorenç, gracias Luis por tu blog.

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