Lucas Vilar, un velocista argentino todavía "un poco tímido", pero que tiene muy bien orientada la clasificación para el Mundial de Santiago

Aún quedan diez semanas para terminar de decidir la clasificación para los Mundiales de Santiago. Pero en el apartado de velocidad, en ese ‘top 30’ del ranking que decide los participantes en este evento, encontramos al argentino Lucas Oscar Vilar, que, a sus 24 años, está realizando un gran esfuerzo para estar entre los elegidos.

Paseando con orgullo el nombre de La Costa. Instagram LV

Por ello, hemos querido conocer un poco más a este ‘costero’, nacido en Eceiza, pero residente en la municipalidad de La Costa, sobre el que nuestra primera pregunta es ese apodo de Osqui con el que se presenta en Instagram.

Mi papá y mi abuelo se llaman Óscar, por eso es mi segundo nombre. Pero quien lo eligió realmente fue mi hermano mayor, y entonces sus opciones eran Goku u Oscar… y por suerte terminó siendo este último. Luego se quedó en ese dominutivo de Osqui y me gusta mucho, porque y algunos amigos del ciclismo y mi novia comenzaron a llamarme así, y me da más confianza.

¿Como fue dedicarte al ciclismo?

Aprendí a andar en bicicleta a los ocho años y es una edad bastante mayor. Me costó mucho aprender y me daba miedo golpearme. Además, a la semana de haber aprendido, nos robaron una garrafa de gas y mi bicicleta, pero rápidamente mis papas me compraron una bicicleta usada amarilla, que fue con la primera que competí. Fue en el ‘Kartódromo General Lavalle’ contra más o menos 25 chicos, y terminé cuarto. Suuuuuper contento, pero con ganas de más obviamente. Hice varias veces cuarto y mi papá decidió comprarme una bicicleta de ‘media carrera’, marca Roseli, obviamente muy vieja y de acero. Lamentablemente se me rompió en la primera vuelta y terminé llorando, pero la siguiente carrera la gané. Pero este deporte me enamoró y aprendí a que no iba a ser fácil, que necesitaba dedicación y sacrificio.

En el CMC donde terminó de decidir ser velocista. Instagram LV
¿Y a la velocidad?

La velocidad fue algo que decidí probar un tiempo, porque me decían que yo sería buen velocista. Pero en Argentina no hay carreras, solamente el Nacional de velocidad y yo quería correr más, por lo que corría en circuito y ruta y dos meses antes del Nacional entraba a la pista a prepararlo. De hecho, como junior fui subcampeón nacional de ruta y a los dos meses, campeón de todas las pruebas de velocidad. Eso me puso en una decisión difícil ya que me llamaron para correr en España y al mismo tiempo para ir al Centro Mundial de la UCI a preparar el mundial junior, pero con la velocidad, dentro del programa ‘Buenos Aires 2018’. La sensación al ponerme la remera de la selección nacional terminó de decidir de que yo quería esto... aunque suponía trabajar durísimo, en una edad difícil, donde todos tus amigos salen de fiesta, pero yo debía dormir y cuidarme para entrenar o correr. Tuve una charla con mi papá donde me dijo ‘¿vos queres salir a andar en bici o queres salir a entrenar ciclismo? Una cosa es correr carreritas acá cerca, algunas domingueras y la otra es buscar ser alguien con el ciclismo es intentar representar al país y hacer todo lo posible en busca de un sueño deportivo, cualquiera de la dos está bien hijo". Ahora es obvio lo que decidí hacer con mi vida.

Al final fuiste al Centro Mundial, en 2018, pero saliendo de una importante lesión…

Aunque se considera un poco tímido, "se que
puedo llegar a todo lo que intente". Instagram LV

Fue duro adaptarme de golpe al entreno, recién recuperado de un esguince de tobillo. Pero lo disfruté y, sobre todo, aprendí muchísimo, y fue donde decidí totalmente que haría velocidad.

¿Cómo te definirías como velocista?

Creo que soy un poco tímido al tomar decisiones y sé que debo trabajar más en mi confianza principalmente. Pero también sé que puedo llegar a todo lo que intente, y puedo sorprender. En cuanto a mis diciplinas favoritas son obviamente la velocidad y el keirin, pero también me gusta muchísimo el scratch o los crits, como los de Estados Unidos así que quien sabe si en algún futuro ande por allí. También sé que tengo que ser un poco más fuerte, más veloz y aprender más tácticamente, casi como el lema olímpico y a eso apunto.

Has ido evolucionando poco a poco, pero este año has dado un salto importante, tanto en Panamericanos como en otras competiciones C1 y C2 por América. ¿Qué balance haces?

La temporada no comenzó muy bien, porque fui a la Copa del Mundo donde no logré nada de lo que buscaba. Pero apenas llevaba mes y medio de entrenamiento, porque estuve trabajando todo el invierno en turnos de madrugada y no podía entrenar. Luego poco a poco fui consiguiendo buenos resultados y en la última carrera que disputé en Trinidad pude demostrar todo el trabajo realizado, ya que estuve muy cerca de Nicholas (Paul).

Santiago supuso su debut en los Panamericanos,
¿y en en Mundial? Instagram LV

Ahora mismo estás virtualmente clasificado para el Mundial, pero aún hay muchos puntos en juego hasta que se cierre la clasificación en septiembre. ¿Cómo eres de optimista?

Soy optimista, si bien la clasificación va a estar muy reñida y seremos muchos con puntos entre el número 20 y 40 peleando por entrar, y cada punto suma o resta. Pero la clasificación sería no sólo un sueño, sino cumplir un objetivo de mi carrera, ya que saliendo desde Argentina es muy difícil, y no sólo en lo económico. En muchos viajes me toca ir solo solo e ir pidiendo ayuda, a ver si me pueden empujar en un keirin o en velocidad. Muchos entrenadores de otros países me han empujado (se ríe abiertamente). Si llego a clasificar todo esto habrá cobrado sentido, todo el apoyo principalmente de mi familia y mi pareja que confían en mí, aun más de lo que confío yo mismo. Pero también la municipalidad de La Costa, y la secretaria de deportes de la provincia de Buenos Aires, de la federación nacional y de la UCRA.

Un primer sueño, que no oculta un segundo, la posibilidad de estar en los próximos Juegos Olímpicos…

Creo que iniciar este año el nuevo ciclo olímpico dentro del Mundial hará que sea más real y posible la clasificación para Los Ángeles 2028.

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