Oro para Igual, en puntuación, y plata para Urkaregui, en persecución, endulzan la amargura de un ómnium que se torció pronto para Almena

Vuelta de honor para Eric Igual. Foto: Marc Bouwens/Baanwacht

Aunque el foco de interés estuviera centrado en Leyre Almena y el ómnium por sus antecedentes en el Europeo, tanto Eric Igual como Eñaut Urkaregui se presentaban como bazas muy sólidas en esta tercera jornada del Campeonato del Mundo junior. Y no decepcionaron, todo lo contrario, ya que el valenciano se proclamaba campeón del mundo de puntuación y el vasco, subcampeón de persecución y con nuevo récord nacional (3:10.040).

Una jornada que también ha coronado al italiano Alessio Magagnotti, en persecución, a la rusa Polina Danshina en ómnium, donde Almena terminaba novena y a la también rusa Veronika Solozobova en velocidad

La primera medalla llegaba en una puntuación en la que Igual fue protagonista desde el principio, corriendo con bastante cabeza y muy motivado, sabiéndose capaz de ir a por todo. Tras un tanteo inicial en los sprints, en los que no fue ajeno, poco antes de mitad de carrera se lanzaba a ganar vuelta junto a Moritz Mauss e Ilya Slesarenko. Con ello la carrera comenzaba a decidirse para ellos, aunque Popov -que no había puntuado hasta ese momento- ganaba una vuelta fácilmente poco después para acercarse al trío cabecero, donde el valenciano empataba en cabeza con Mauss tras el séptimo sprint.

El valenciano, con el segundo 'arco iris' junior español de la historia.
Foto Marc Bouwens/Baanwacht

El marcaje entre los cuatro se mantuvo en ese tercio final y a falta del último sprint, el español aventajaba en 1 punto al alemán, en 4 al ruso y en 6 al bielorruso, lo que garantizaba un desenlace emocionantísimo… aunque uno se quedaba sin medallas. Igual sabía que tenía que impedir que cualquiera de ellos le superase en el último sprint y a por ello se lanzó, con una seguridad absoluta, para ganarlo y llevarse el oro, con 43 puntos, por delante de Mauss, con 34, y de Slesarenko, que siendo segundo empataba a 33 y dejaba fuera del podio a Popov.

Se trata del segundo oro de la historia para un ciclista junior español, tras el logrado por Rubén Sánchez en Cali hace dos años, y que se vivió de este momento cuando el valenciano llegaba al box español.

“Ha sido una carrera increíble -nos contaba el valenciano-. Me he encontrado bien desde el principio y sabía que tenía que correr con calma, no gastar en las primeras vueltas y esperar hasta el momento en que podía aprovechar, intentando algún movimiento. Y ha salido bien uno, y ya sólo era cuestión de remar, de ganar esa vuelta que me iba a dar mucha tranquilidad, ya que no tenía que competir ya contra todos, podía fijar un poco el foco. Cuando he ganado la vuelta estaba un poco cansado, pero sabía que también el resto, y sobre todo sabía a quien tenía que controlar. De cara al último sprint me encontraba bien. Pero no sabía en que pensar muy bien en ese momento, en una medalla que ya tenía o que el triunfo podía ser mío. Y a por eso he ido. La última vuelta ha sido brutal, he sufrido como nunca y cruzar la meta es algo que no pudo describir”.

"Viendo los tiempos que iban haciendo, sabía que podía estar ahi"

Úrkaregui, en el podio de la persecucición. Foto: Fed. Española

Por otro lado, ya había avisado el ciclista vasco de que tenía muchas ganas en la persecución en la que por muy poquito se quedó fuera de la lucha por las medallas en el Europeo. Y dicho y hecho, en la clasificatoria registraba un sensacional 3:10.040, que no solamente batía el récord de España que poseía desde el Mundial de Luogang (3:11.622), sino que le suponía la segunda plaza, es decir, meterse en la lucha vespertina por el oro y la plata, contra el italiano Alessio Magagnotti, que le había aventajado en poco más de un segundo (3:08.967).

Desgraciadamente esa diferencia no pudo reducirse en la final vespertina, donde el italiano dominó desde la primera vuelta e incluso con diferencias bastante más amplias, que fueron de cinco segundos al final (3:09.255 a 3:14.364). De todas formas, un excelente resultado el de Urkaregui, para el que hay que remontarse hasta Middelsborough 1990, cuando Jonathan Garrido lograba el subcampeonato en esta misma prueba, la única medalla española en esta disciplina y categoría. En este caso estamos hablando de la séptima plata del ciclismo español.

“Muy contento -nos contaba Urkaregui-. Por la mañana salía de los últimos, por lo que he ido viendo tiempos que iban haciendo y sabía que podía estar ahí. He dado el cien por cien, me he clasificado para la final A y muy contento. Luego ya sabíamos que el rival en la final era muy fuerte. Y ha pasado factura la serie de la mañana, pero tengo que estar muy satisfecho con este segundo puesto”.

Danshina, campeona de Europa y del mundo. X UCI

El británico Daniel Thompson dominaba en todo momento su enfrentamiento ante el australiano Toby Jones para hacerse con el bronce: 3:12.078 a 3:13.465. Por su parte, 3:21.895 fue el tiempo del segundo español, Carlos Core, que le suponía la vigésimo cuarta plaza en una prueba en la que, como dijimos en nuestra previa, se dieron cita hasta 41 ciclistas.

Historia de un accidentado omnium

El ómnium comenzaba con un accidentado scratch en el que se cayó más de la mitad del pelotón y entre ellas Almena, que pudo evitar una primera caída pero no una segunda, con tan mala suerte que le pasaron varias corredoras por encima. Los comisarios clasificaron por orden a las ciclistas que pasaron por meta, con Boothman, Sanders y Danshina en las primeras posiciones, y al resto, a partir de la décima las dieron ese mismo puesto y puntos.

Pero lo peor fue que la valenciana no estaba bien. La caída le había supuesto varios golpes que la impidieron estar a su nivel en la tempo, en la que se quedó sin puntuar, para terminar decimoséptima y bajar al decimotercer lugar en la general a mitad de ómnium. Una prueba en la que Boothman, Fialla, Sanders, Danshina y Jimenez Palos ocupaban las primeras posiciones tras ganar vuelta y al mismo tiempo comandaban una general que ya comenzaba a mostrar jerarquías.

La eliminación, como siempre, ratificó las aspiraciones de algunas, como Danshina, Jimenez Palos o Fialla, primera, segunda y cuarta, y supuso un jarro de agua fía para otras como Sanders, novena, y sobre todo Boothman, decimoquinta, aunque ambas se mantenían con opciones, en una general que comendaba la rusa con 110 por delante de la estadounidense y la danesa, con 104. Para Almena, con mejores sensaciones ya que estuvo metida en carrera hasta casi el final: con el sexto lugar subía a la décima posición provisional, lejos del podio, pero con opciones de subir algún puesto más. Y sobre todo con ganas de salir al todo.

El seleccionador Peralta, con su pupilo. Foto: Fed. Española

Pero la carrera no estaba para muchos movimientos porque había muchas interesadas. La valenciana terminaría subiendo un puesto, pero por la caída de Boothman, que sí salió con ganas de mover el avispero, pero terminó en el suelo. Danshina controló bien la situación, a pesar de los intentos de Fialla, mientras que Sanders y Jimenez Palos, sin perder de vista la segunda plaza, bastante tenían con luchar por el bronce, en una pelea en la que se metió de forma inesperada la bielorrusa Yana Daniluk con una vuelta ganada, pero que se veía al final fuera del podio en el desempate con la australiana, ambas con 109, por 108 de la estadounidense y por delante, rusa y danesa con 124 y 117. Para Almena, 70 puntos.

Nuevo récord para Axel Moreno

Las últimas medallas en juego fueron las de la velocidad femenina, en la que Veronika Solozobova, con bastante facilidad ante Yiran Van ’t Oosten, y Zita Gheysens, en el desempate ante Matilde Cenci tras una competida serie, se plantaban en la final. Y la rusa demostró lo que ya se vio desde ayer, ser la mejor velocista de este Mundial para derrotar en dos mangas a la belga, mientras que la final B se jugó en el desempate en el que la neerlandesa intentó sorprender, pero la italiana impuso su mayor punta de velocidad.

La jornada se completó con el inicio del torneo de velocidad masculina, en el que Taheo Choi (9.901) y Archie Gill (9.936) eran los dos más rápidos en los 200 metros, y los únicos en bajar de los 10 segundos. Una clasificatoria en la que se establecía un nuevo récord nacional a cargo de Axel Moreno, que, con 10.427, batía los 10.464 que había establecido Sandro Abadia en el Mundial del año pasado, y que le suponía la decimotercera plaza. Tras medirse y superar al venezolano Rafael Bladimir Alvarado en dieciseisavos, el rival de octavo eran palabras mayores, el polaco Tomasz Lamaszewski, que ponía fin a su participación. Por su parte, Pedro José Nicolás marcaba 10.837, que no le permitía por un solo puesto, vigesimonoveno, acceder a la primera ronda. Mañana cuartos, semifinales y finales.

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