La propia Dori Ruano, con la que he tenido la suerte de
compartir algunos de los momentos de su vida profesional, primero como
corredora, luego como directora y ahora como compañera en Eurosport, contaba en
su perfil de Facebook que “el libro rescata el camino que recorrí desde
aquellas primeras pedaladas en una bicicleta de paseo hasta conquistar un
título mundial. Pero, sobre todo, pone palabras a aquello que casi nunca se
ve: las caídas, los sacrificios, los miedos, la soledad, la dureza de un
deporte en el que a las mujeres nos tocó —y aún nos toca— empujar contra el
viento. Es un viaje que habla de desafíos, de romper inercias y prejuicios
en una España que apenas imaginaba a mujeres compitiendo sobre dos ruedas. Y
también es un homenaje: a las pioneras, al ciclismo femenino, a quienes soñaron
antes que yo y a quienes siguen pedaleando hoy para que nada sea como antes”.
Como bien dice, ojalá la historia inspire a deportistas,
amantes del ciclismo y a cualquier lector que busque verdad, coraje y
determinación.

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