Ocho días por Hong Kong, en una Copa de las Naciones muy diferente

Poco antes del inicio de una de las pruebas
Foto: Track Cycling Nations Cup Hong Kong, China

Por Eukene Larrarte

Para una prueba tan atípica como este inicio de la Copa de las Naciones, nada mejor que una crónica diferente, desde dentro, gracias a la colaboración de Eukene Larrarte, que nos ha contado su día a día esta semana en Hong Kong y que desde TrackPiste os trasladamos, pocas horas antes de que el vuelo con la selección tome tierra ya en Madrid.

Lunes: Ya en Hong Kong

Ya estamos en Hong Kong, con un día de retraso, por algunos problemas con las PCR, ya que nos tuvimos que hacernos otra, pero no vamos a echar culpas, ya que creo que no fue fallo nuestro. Sin más. Volamos de Madrid-Doha, un viaje que se hace largo, y luego una escala de dos horitas o tres, antes de coger el vuelo hasta Hong Kong. La verdad es que he hecho todo el viaje dormida, y ahora nos espera bastante jaleo en Hong Kong. Es increíble el control que tienen de todo. Hay un montón de personal por el tema del Covid y había incluso una persona encargada de abrir una sola valla. Hemos rellenado un formulario, nos han dado una QR que tenemos que enseñar a cada paso que das y ahora nos toca hacernos la primera PCR, en el mismo aeropuerto. Y esperar aquí a que nos den el resultado, que nos puede llevar cuatro horas según nos han dicho, paciencia.

Días previos en el velódromo…

Esperando en el aeropuerto el resultado
de la primera PCR. Foto: EL

Segundo y tercer día por aquí, después de tener bastante trajín hasta llegar al hotel. Ayer ya tuvimos el primer entrenamiento en el velódromo. Son días para probar la pista, pero, personalmente, no son buenos para fiarte mucho de las sensaciones, después de un viaje de más de 24 horas. No tenía buenas sensaciones y me he limitado a rodar con poco desarrollo. Y hoy un poco igual, apretando un poco más, escuchando al cuerpo y ver que todavía no estoy recuperada del viaje. Espero tener luego masaje y regenerar un poco las piernas.

Se nota que es una Copa de las Naciones bastante poco al uso. No hay más que ver los boxes, separados con unas paredes altas de plástico duro. Y también se nota en los entrenamientos que somos muy pocos. Normalmente en cada franja horaria solemos coincidir varias selecciones y ahora estamos solos con los daneses.

Mamparas de cristal entre los boxes.
Foto: Track Cycling Nations Cup Hong Kong, China.

Nos han dicho que los días de las competiciones no se va a poder calentar dentro del velódromo, sino fuera y que tenemos que llevar mascarilla siempre dentro, salvo cuando salgamos a la pista, que se la damos al seleccionador y sólo al seleccionador en ese momento antes de empezar a correr. Aunque la verdad hemos visto que la gente ha calentado dentro del velódromo y sin mascarilla.

Por cierto, ya llevamos tres PCR incluyendo la que hicimos en el aeropuerto. Luego será cada dos días. Hay unas carpas fuera del velódromo y con el QR nos lo hacen super rápido y al día siguiente nos dan el resultado.

Son las dos o tres únicas horas que estamos fuera. Luego toca coger el bus de vuelta, llegar al hotel, coger la tarjeta y subir a la habitación. Y no hay nada más que hacer.

Pasillo del hotel, con la sillas donde se dejaba
la comida y el vigilante al fondo. Foto: EL

…y en el hotel

Nuestra vida estos días se resume en ese entrenamiento, que estos días ha sido a la mañana, y el resto de tiempo en el hotel, en la habitación. No hay mucha historia, la verdad. Todas las comidas nos las sirven en la puerta, según un menú que ya le dimos antes de viajar, la cogemos y la comemos en la habitación. 

Cuando hemos tenido que salir al velódromo, debíamos permanecer en la planta, hasta que nos dan el OK para salir y para bajar, porque hay una persona, incluso dos, vigilando nuestra planta y nuestros movimientos. El día antes tenemos que comunicar los horarios de salida. Y si salimos a las nueve y media, hasta las nueve y veinte no podemos estar en el pasillo, y cuando estamos ya todos, el vigilante nos da el OK. Tenemos que dejar las tarjetas de la habitación en el hotel e ir hasta el bus que nos lleva al velódromo. 

Como muestra te diré que una vez ya habíamos llegado al velódromo, y creíamos que ya podíamos bajar. Nos dijeron que no, y el bus se movió no más de dos metros hasta el punto en el que ya pudimos descender. Entonces ya podíamos salir. Está todo controlado al milímetro.

Viernes: Medalla en la eliminación

Hoy ha sido un gran día, y muy largo, ya que son las once y acabo de llegar a la habitación. Primera jornada de competición y medalla en la eliminación. Sabemos lo que hay en lo referido en la participación, pero no voy a negar que siempre supone una pequeña alegría, y que te da moral para las pruebas más importantes.

Sábado de omnium, de menos a más

En el podio de la eliminación. Foto: Fed. Española

También se ha hecho largo el día. Tenía clarísimo que el ómnium se iba a jugar en la puntuación y aunque la cagara al principio, había tiempo para recuperar. En el scratch he visto algo de ventaja, he atacado, pero luego no me he vuelto a colocar bien y he empezado la última. Tampoco iba muy así. La tempo es una carrera que se ha ido a fuego y lo raro es que no dejaban entrar a la japonesa -Kajihara- cuando estaba a punto de ganar vuelta y eso nos perjudicaba porque nosotras no podíamos puntuar y ella seguía sumando sin hacerle falta. Lo más lógico es que se hubiese parado, pero se seguía a palos. Me ha costado entrar.

En la eliminación ya me he sentido mejor y en la puntuación la carrera se paraba mucho entre sprint y sprint. He visto que me podía meter bien y que la gente iba un poco atufada, sobre todo la otra japonesa -Suzuki-, y el seleccionador también me ha dicho que la austriaca tampoco iba bien. Pero en el último sprint ha sacado un sprint de no sé dónde… y sexta, perdiendo una plaza. Es lo que hay. Me quedo con que he ido de menos a más.

Una de las pruebas que afrontó en Hong Kong
Foto: Track Cycling Nations Cup Hong Kong, China.

Domingo: una madison con fallos técnicos

Con sólo cuatro parejas, sabía que iba a ser una madison diferente, que tenías que estar en todos los sprints. Haciendo autocrítica, hemos fallado técnicamente. No nos colocábamos bien, luego hemos intentado cambiar el relevo para esprintar yo. Todo era cuestión de colocación y nos ha costado. Al final las dos parejas japonesas estaban sufriendo y quizá tendríamos que haber apretado antes. Si lo hubiéramos hecho, quizás se habrías descolgado y habríamos podido acceder al podio. Pero esa prueba en que somos conscientes de que tenemos que trabajar la técnica y seguir haciendo carreras juntas. No hay más.

Y es que por ejemplo la pareja de negro –Kie Furuyama y Nao Suzuki- físicamente no era más fuerte, pero técnicamente se notaba que era una pareja trabajada. También es cierto que vamos notando mejora poco a poco.

Lunes: de vuelta a casa

Terminamos este repaso a los ocho días en Hong Kong con la despedida de la propia Eukene desde el aeropuerto de Hong Kong.