Derek Gee, la gran revelación del Giro, también proviene de la pista

Rendido tras su esfuerzo. Foto: Israel Premier Tech

Derek Gee terminará el Giro de Italia sin una victoria de etapa, pero no será porque no lo haya buscado y se haya quedado cerca: hasta en cuatro jornadas el canadiense tuvo que conformarse con la segunda plaza, lo que equivale a decir que ha sido la gran revelación de la ‘corsa rosa’.

Y aunque muchos medios señalan que es un desconocido, para los seguidores de la pista no lo es en absoluto, ya que era -y posiblemente puade seguir siéndolo- uno de los puntales de la cuarteta canadiense, con la que logró la quinta plaza en los Juegos Olímpicos de Tokio, donde también intervino en la madison junto a Michael Foley, aunque no terminó esta segunda prueba. Un puesto que era el mejor de Canadá en esta disciplina desde 1932.

Nacido en Ottawa, pero residente en Osgoode, en la periferia de la capital, practicó ciclismo desde niño y mantuvo un curioso duelo con su padre, para ver quién de los dos se proclamaba antes campeón de Canadá: su progenitor lo logró en 2014 como campeón master 50 de carretera, pero el hijo ha sumado 13 entre pista y carretera.

Durante el pasado ciclo olímpico se dedicó de lleno a los velódromos, dejando de lado la carretera, pero simultaneándolo los primeros años con una licenciatura en Ciencias, aunque desde 2019 se centró exclusivamente en preparar Tokio.

Foto oficial de Canadian Cycling previa a Tokio

Muchos pájaros... en la cámara fotográfica

La pandemia complicó sus planes, pero le hizo descubrir su gran hobby, la ornitología: en concreto, fotografíar y documentar todo tipo de aves. Primero fue una actividad para pasar su tiempo libre con poco esfuerzo, pero después su interés ha crecido, apoyado por los numerosos viajes que tiene que realizar por su profesión.

Dicen que la nacionalidad canadiense del mecenas del Israel-Premier Tech, Sylvan Adams, ha sido la que le ha dado la oportunidad de llegar a profesional, a los 25 años -cumplirá 26 el próximo 3 de agosto-. No lo sé. Lo cierto es que se lo ganó la pasada temporada, cuando militaba en el equipo filial y pudo correr con la entonces escuadra WT en el Gran Camiño y en la Milán-Turín, con una notable actuación en ambas pruebas, en especial en la cita gallega, donde terminó quinto en la contrarreloj de Sarriá.

Su gran balance en el Giro le ha dado confianza para su periplo en carretera, pero no hay que descartarle para París 2024, a pesar de su ausencia de los velódromos estos meses. Es más, junto a Michael Foley, y los jóvenes talentos Dylan Bibic, Mathias Guillemette o Carson Mattern podría tener lugar en una cuarteta olímpica de lujo el próximo año.

En este vídeo distribuido por el equipo israelí podeís conocer más detalles del canadiense.