Merenciano, tras su explosión del Nacional espera la confirmación en el Europeo de Anadia: “Estoy haciendo los mejores datos de siempre”

Podio de la puntuación, con el maillot de campeón de España sub23.
Foto: Román Mendoza

Uno de los momentos más emotivos de los pasados Campeonatos de España fue la explosión de felicidad del valenciano Alejandro Merenciano cuando se abrazó llorando con su entrenador, Jaume Barber, tras proclamarse campeón sub23 en la puntuación. Dos días antes, había logrado la medalla de bronce en la persecución, con lo que se confirmaba como uno de los mejores ciclistas de la categoría en el Nacional.

“No me estaban saliendo las cosas. Para el nivel con el que me veía, no me llegaban los resultados. Pero al final todo salió. Lo había pasado mal y para una persona como yo, que expreso mucho mis sentimientos, fue el momento de romper, y más cuando estaba con mi entrenador, que es una persona que me motiva muchísimo”.

Volviendo a ese momento, Merenciano señala que “mi objetivo principal en los Campeonatos era la persecución, aunque tampoco la había entrenado mucho. Pero como estaba bien, me salió un tiempo muy bueno para un velódromo como el de Valencia. La pena fue por la tarde, en la final contra Eloy que se terminó antes de tiempo por su avería, ya que pienso que habría mejorado el tiempo de por la mañana”.

De la puntuación de Valencia a la de Anadia

'Soldado' a la rueda de Torres. Foto: DstrelCyclingPedro Jiménez

Pero fue en la puntuación donde se salió. “Ese día me encontré super, iba muchísimo. Se me escapó coger la primera vuelta al principio, pero sabía que, si podía estar con Torres, haría un buen resultado, como así fue. Y es que es una prueba en la que, si no vas rápido, no tienes ninguna opción”.

Todo ello le valió la llamada del seleccionador para el Europeo sub23 -del 11 al 16 en Anadia, Portugal-, donde competirá en la persecución por equipos, en la individual y en la puntuación. Un evento para el que está “muy motivado, porque estoy haciendo los mejores datos de siempre. Después de Brno -donde compitió con la selección valenciana a mediados del mes pasado-, he hecho un bloque de entrenamiento en pista muy fuerte y pienso que llegaré en un gran momento”. Y de las tres pruebas que afrontará, “la puntuación es mi objetivo. Si tengo el día, puedo estar ahí, metido en carrera, aunque tampoco tengo referencias claras de hasta donde puedo llegar. No he corrido mucho internacionalmente este año".

Y es que, a diferencia de otros corredores sub23 que estarán en el Europeo, Merenciano no ha estado en ninguna competición internacional con la selección en esta temporada… salvo la experiencia de carretera en la Challenge de Mallorca. “Fue muy duro, por el nivel que tienen los profesionales incluso a principios del año. Y además tuvimos días muy malos por la lluvia y el tiempo. Pero la experiencia fue chulísima, con todos los World Tour, y el último día conseguimos llegar con el pelotón al circuito final y fue un gran momento”.

Por el bronce en la persecución. Foto Dstrel Cycling/Pedro Jiménez

No obstante, en el Campeonato de España de ómnium y madison, en marzo, ya dio un aviso de que había que contar con él. “En el ómnium no me salieron las cosas, porque llegué sexto o séptimo a la puntuación, pero cuando quise jugar mis bazas, no llegó un buen momento. En la madison -junto a José Segura- salimos a coger vuelta, y pusimos un desarrollo para ello, y nos salió bien. Pero en los sprints, como llevábamos varios dientes menos, me notaba con fuerzas, pero no me daba para remontarlos. Al final pudimos mantener una plaza en el podio”. Y sobre sus opciones de volver a la selección, “yo seguía con mi misma línea, seguir mejorando, alcanzar un buen nivel. Sabía que, si lo lograba, volverían a contar conmigo en la selección”.

Ciclista por tradición, pistard por afición

Valenciano de Albal, contaba no hace mucho en una entrevista en proyecto FER que “estaba predestinado a ser ciclista, porque en mi familia hay bastante tradición. Pero la pista la descubrí hace dos o tres años, aunque me enganchó desde el principio. Y tuve la suerte de ganar la madison del Campeonato de España de cadete, en 2020, que era mi primera gran competición”. Precisamente con Segura, otro ciclista valenciano llamado a hacer grandes cosas, aunque no haya sido seleccionado para el Europeo.

Dando el relevo a Segura en el Nacional de madison. Foto: Martin Early

Como corredor, considera que “me falta algo de velocidad. Fue lo que noté en Brno, un velódromo que me perjudicaba bastante porque la gente se lo jugaba en los sprints y luego, al tener una cuerda tan larga -400 metros- nadie intentaba ir a ganar vuelta. Pero creo que tengo mucho margen de mejora, sobre todo en la persecución, que es una disciplina que te vale para mucho. Y tampoco estoy hecho físicamente”. Y sobre la compatibilidad carretera-pista, señala que “lo que mejore en una disciplina, me va a servir para la otra. Este primer año ha sido de adaptación en la carretera, donde no he tenido muchas exigencias, pero pienso que las puedo compaginar”.

En otras entrevistas, habíamos leído que tiene como ídolos a Filippo Ganna y Primoz Roglic. Cuando se lo recordamos, sonríe por que no cabe plantear ningún pero a su elección. “Ganna está tocado por una varita, un corredor que es capaz de hacer una persecución en menos de cuatro minutos, y de destacar en una París-Roubaix, lo dice todo. En cuanto a Roglic, me gusta por su constancia, porque sabe siempre lo que tiene que hacer, aunque le peguen palos”. A nivel más cercano, se refiere a “Sebastián Mora, claro está, Un corredor que siempre da la talla. Además, es muy cercano. Siempre que he coincidido con él, me ha dado consejos, diciéndome lo que haría en mi caso”.

Un gran trabajo y una gran generación en Valencia

En la Challenge de Mallorca. 
Foto: Ciclo21

También tiene otro referente, su paisano Segura. “Somos de la misma edad -ambos nacieron en julio de 2004- y hemos coincidido en todas las categorías. Me gustaría correr con él alguna madison al más alto nivel, porque nunca hemos coincidido. Además, en las pruebas nacionales que hemos corrido, nunca hemos estado bien los dos a la vez”. En este sentido también se refiere a la gran cantera que hay en Valencia. “Se están haciendo muy bien las cosas, con Jaume (Barber), con Guillermo (Ferrer). Hay una generación muy prometedora, que le gusta la pista y que quiere compatibilizarla con la carretera”.

Sin embargo, en la vida de Alejandro Merenciano también hay otra fecha clave, “el 3 de febrero de 2021. Iba a clase en bicicleta, porque estaba haciendo el grado medio de Actividades Físicas. Había un autobús parado y no recuerdo más”. Un coche se le llevó por delante, “estuve un par de días en la UCI y tres meses para volver a la carretera, porque tenía una mancha de sangre en el cerebro y hasta que no se absorbiese no era conveniente salir”.

Un accidente que, sin embargo, “nunca lo he asociado con la bicicleta, quizá porque no estaba entrenando, sino simplemente usando la bici para ir a clase. De hecho, lo que quería era recuperarme lo antes posible, volver a entrenar y a competir. Normalizar la recuperación y volver a mi nivel”. En Valencia lo ratificaba y esperemos que en Anadia, la próxima semana, de un paso más.