Bonhomme quiere reencontrarse en la carretera sin descartar la pista

Foto oficial de Bonhomme para los JJOO de París

Tras competir en sus segundos Juegos Olímpicos el verano pasado -cuarta en Tokio y octava en parís, siempre en la persecución por equipos- la ciclista canadiense Ariane Bonhomme no tenía claro su futuro deportivo. Estaba considerando seriamente retirarse, pero un viaje en bicicleta de París a Girona, le hizo decidirse a continuar como ciclista, al menos en carretera, pero manteniendo la duda sobre si estará en el próximo Mundial, tal y como cuenta en Sportcom.

La quebequesa aún estuvo con la selección en el Mundial de Ballerup y en la Copa de las Naciones de Konya, pero la escasez de grandes eventos en esta temporada tan extraña le hizo decidirse a competir en carretera, con el equipo estadounidense LA Sweat Racing.

“Necesitaba un cambio y competir más en ruta durante el verano. El ciclismo en pista no ha terminado, pero estoy feliz de tener la oportunidad de experimentar cosas nuevas y volver a lo que hacía cuando era más joven. Después de dos Juegos Olímpicos, quería ponerme a prueba a mí misma”, comentaba la ciclista canadiense

"Soy buena esprintando y soy capaz de hacer sprints muy largos. Puedo mantener la potencia durante largos periodos, lo que podría darme ventaja. Por otro lado, mi temporada en carretera me ha dado resistencia. Creo que será mucho más fácil prepararme para las carreras de persecución por equipos cuando vuelva a la pista", terminaba la ciclista, de 30 años, que deja abierta la puerta a competir en el Mundial de Santiago de Chile, en octubre.

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