La UCI determina por primera vez la superficie de los velódromos, entre las muchas modificaciones recogidas en la Reglamentación 2026

Tal y como comentábamos ayer, las principales novedades en la Reglamentación UCI de pista para 2026 se centran en los velódromos, especialmente en aspectos de seguridad aplicables, en principio, a los nuevos recintos que se homologuen a partir del próximo 1 de enero.

Estructura de la pista de aluminio en Tucson, que necesitará
una autorización especial. Facebook Tucson Velodrome

Sin embargo, la más llamativa de todo es que, por primera vez, se define que “la superficie de la pista debe ser de madera, hormigón o asfalto”. Y la duda es si el velódromo de aluminio que Peter Junek está construyendo en Tucson, Arizona, podría ser rechazado por la UCI. En este sentido, el máximo organismo internacional recoge que “la utilización de otros materiales está autorizada únicamente previa presentación de un expediente a la UCI para su homologación, demostrando que todas las características de superficie esenciales para la disciplina están garantizadas”.

También se incluye otro aspecto nuevo relativo a la resistencia. “La superficie de la pista debe poder soportar una carga mínima de 5 kN en cualquier punto de la pista. El cálculo de la carga de debe ser certificado por un ingeniero estructural y facilitado a durante el procedimiento de homologación, antes de que se instale la pista”.

Antes de continuar, destacar que la clasificación -bastante poco detallada- de los velódromos en cuatro categorías, se reduce a una simple diferenciación, también muy básica, en clases A y B. Los primeros son los interiores, de madera y una cuerda de 250 metros; los segundos, el resto, sean interiores, cubiertos o semicubiertos, y exteriores, independientemente de sus dimensiones. Para todos ellos se establece una condición única de poder admitir una velocidad mínima de seguridad de 85 km/h.

En cuanto a la anchura, las pistas de categoría A deben tener un mínimo de 7 metros y para las B, se especifica que “deben tener una anchura proporcional a su longitud, con un mínimo de 5 metros”, pero sin determinar en qué consiste esa proporcionalidad.

Nuevas marcas sobre la pista

Salida de la persecución por equipos, donde se observan las marcas
con cinta que ahora serán pintadas en blanco. La línea de persecución
también deberá ser repintada en blanco. Foto: F.C-LM.
Volviendo a la superficie, se especifica que las líneas transversales no deben extenderse por encima de la zona azul, que la línea de persecución cambia su color, de rojo a blanco, y que los puntos de salida de los equipos de persecución y velocidad también deben ser pintados sobre la pista, en lugar de las marcas con cinta adhesiva que se usan actualmente, a 11 cm de la línea de persecución.

* Persecución por equipos: Cuatro marcas blancas (cada una de ellas un cuadrado de 9 cm²), separadas 1 metro entre sí. La primera, que define la posición de las demás, se estará en la línea de medición.

* Velocidad por equipos: Tres marcas rojas (cada una un cuadrado de 9 cm²), separadas 1,5 metros entre sí. La primera marca, que define la posición de las otras, debe estar situada a medio camino entre la línea de medición y la línea roja de sprinters (es decir, junto en la mitad del pasillo de sprinters).

Más seguridad con las balaustradas

Las características de la balaustrada interior y la exterior también se detallan pormenorizadamente. La interior, de al menos 120 centímetros de altura por encima de la zona de seguridad, podrá tener carácter provisional durante las competiciones siempre que no haya diferencia o fuerte pendiente entre la zona de seguridad y el centro de la pista o dentro del centro de la pista. Debe ser estable, fijada sólidamente, transparente y sin paneles publicitarios, y no tener bordes ásperos ni partes salientes, con el borde superior cubierto con una banda protectora. El vallado interior debe ser continuo y, en la medida de lo posible, sin huecos, aunque cuando sean inevitables, deben ser inferiores a 1 cm.

La convivencia con la pista de atletismo existente en muchos velódromos,
un problema para la instalación de la balaustrada interior como se ve en el Lluis Puig
La balaustrada interior debe soportar como mínimo las siguientes cargas, certificado por un ingeniero estructural y facilitado en el procedimiento de homologación:

  • 4 kN aplicados en cualquier punto hasta una altura de 65 cm
  • 1,5 kN aplicados en cualquier punto por encima de 65 cm y hasta la parte superior de la misma

Cuando el interior de la zona de seguridad esté 1,5 metros o más por debajo del centro de la pista, la balaustrada interior debe aumentar hasta 2 metros y se deben instalar protecciones adicionales  (red, paneles, etc.) para reducir el riesgo si hay una caída accidental.

Las puertas instaladas en la balaustrada deben tener un sistema de cierre fácil y fiable. Deberán estar cerradas durante las carreras y los entrenamientos.

En cuanto a la exterior, su altura debe tener una altura total de al menos 140 cm por encima de la pista para los velódromos cuya homologación inicial tenga lugar después del 1 de julio de 2025 (ojo con la fecha, distinta a la de la interior). La parte interior de la valla debe ser completamente sólida y lisa, sin asperezas ni partes salientes.

La balaustrada exterior debe soportar como mínimo las siguientes cargas, certificado por un ingeniero estructural y facilitado en el procedimiento de homologación:

  • 4 kN aplicados en cualquier punto hasta una altura de 65 cm
  • 1,5 kN aplicados en cualquier punto por encima de 65 cm y hasta la parte superior de la misma

Londres cambió la balaustrada exterior... pero no evitó el
accidente de la Champions League. Foto: Lee Valley Velo Park

Cuando la zona exterior de la pista sea al menos 1,5 metros más baja que el borde exterior de la superficie de la misma, deberá instalarse una protección adicional (redes, paneles, etc.). En los velódromos para los que se solicite la homologación inicial después del 1 de enero de 2026, es obligatoria la instalación de una valla exterior con una altura mínima de 2 metros como parte de las medidas adicionales.

El color de la balaustrada exterior debe contrastar fuertemente con el color de la pista. En caso de que sea transparente, la parte inferior (hasta una altura mínima de 65 cm de la pista) no debe serlo.

Finalmente, las puertas peatonales situadas en la balaustrada exterior deben abrirse hacia el exterior y ser fáciles y fiables de cerrar. Deben estar cerradas durante las carreras y los entrenamientos.

Iluminación y homologación

Otro aspecto que tiene una nueva redacción, aunque no hay cambios, es la iluminación vertical, que se establece en 300 Lux (media mantenida) en las sesiones de entrenamiento, de al menos 1.000 Lux para los velódromos de categoría A y de 500 Lux para los velódromos de categoría B, que aumenta hasta 1.400 Lux (uniforme y media mantenida) en Copas del Mundo, Mundiales, Campeonatos Continentales y Juegos Olímpicos.

Por último, sí hay novedad en la precisión de que las luminarias y su colocación deben estar diseñadas y orientadas de tal forma que eviten el deslumbramiento de los corredores, los espectadores y la televisión.

Finalmente, hay un cambio importante en el procedimiento de homologación de los velódromos, que pasa a ser responsabilidad de los gestores del recinto y no de la federación nacional, que debe enviarse a la UCI al menos 2 meses antes de la fecha de inspección prevista, cumplimentando el formulario de solicitud y acompañada de un expediente técnico completo conforme al modelo normalizado de la UCI. En todos los casos, la federación nacional del país en el que se encuentra el velódromo debe ser informada e implicada en el procedimiento de homologación. La UCI podrá solicitar cualquier documento o información complementaria.

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