A punto de comenzar la
temporada invernal de ciclismo, la campeona olímpica Katie Archibald dice que está decidida a no caer en la trampa fiarse
de la experiencia de Río, ya que ella y sus compañeras de equipo apuntan a
un éxito aún mayor en Tokio el próximo verano.
Archibald,
que ganó el oro olímpico junto a Laura Kenny, Joanna Rowsell-Shand y Elinor
Barker en 2016, se ha mantenido como un pilar del equipo
británico, recogiendo títulos mundiales, europeos y de la Commonwealth en estos
tres años posteriores.
Ahora, con los meses pasando
rápidamente hacia a otros Juegos Olímpicos, Archibald dice que está ansiosa por evitar la autocomplacencia
que podría llegar con un récord de medallas tan impresionante.
"Me escucho a mí misma
haciendo referencia al ciclo olímpico de Río", admite. “Nuestros
preparativos para esos Juegos no fueron perfectos, pero ganamos, por lo que
puede ser un barómetro bastante fácil de usar en términos de medir cómo te
sientes en este momento en relación a hace cuatro años. Sin embargo, creo que
es un error. Obviamente soy una
ciclista diferente, somos un equipo diferente y tenemos aspiraciones diferentes”.
Uno de los grandes cambios
antes de estos Juegos, donde Kenny y Barker se unen a Archibald para disputar
nuevamente el equipo de la persecución, es la
novedad de la madison femenina, por lo que ofrece aumenta la cantidad de
medallas de oro de fondo a tres.
Después de Río, Archibald ha
ganado títulos mundiales tanto en la madison como en el omnium, pero la
escocesa tiene una idea clara de sus propios objetivos personales para Tokio.
“Realmente quiero estar en ese equipo de
persecución y tener un lugar en la madison. He cambiado mi punto de vista
respecto al omnium para asegurarme de que los otros dos sean ambiciones
realistas, porque somos una nación que busca medallas de oro. Me siento
bien con esa decisión".
En un año en el que las
pruebas de la Copa del Mundo son fundamentales para la clasificación olímpica,
la segunda manga se llevará a cabo entre el 8 y el 10 de noviembre en el
velódromo de Sir Chris Hoy, en la Escocia natal de Archibald. "Es genial volver. Hay una sensación
de orgullo, pero también más presión. Estoy emocionada de participar en
algunas carreras de madison en toda la serie de la Copa del mundo, porque
realmente no hay muchas oportunidades para hacerlo antes de Tokio. Correr
contra las mejores del mundo realmente cambia la dinámica, y le da un gran
valor a estas oportunidades".
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