La FAC denuncia: “Zaragoza no merece el velódromo precario que tiene, pero ninguna Administración se ha sentado a escucharnos”

La Federación Aragonesa de Ciclismo (FAC) ha enviado un comunicado de prensa en el que informa del grave estado del velódromo de Zaragoza, avalado por un informe técnico en el que se evidencian las graves deficiencias de esta instalación, como grietas y agujeros, así como una zona abrasiva, que ponen en peligro la integridad física de los corredores.

Según el comunicado de la FAC, el informe, que está avalado por el Colegio Oficial de Peritos e Ingenieros Técnicos, fue entregado y registrado en el Ayuntamiento el 6 de mayo del año pasado, pero, desde entonces, no se ha obtenido ninguna respuesta. 

“Una ciudad como Zaragoza no merece el velódromo precario que tiene, pero en los últimos diez años ningún Gobierno, ni de la administración municipal ni de la autonómica, se ha querido sentar a escucharnos con seriedad”, denuncia Luis Marquina, presidente de la Territorial.

A nivel deportivo, el lamentable estado de las instalaciones hace que la modalidad de pista no se pueda desarrollar. Tampoco se pueden celebrar pruebas oficiales y quienes compiten en esta disciplina tienen que desplazarse a Tafalla (Navarra) para entrenar, la localidad más cercana con un velódromo en condiciones. “Incluso teniendo apoyo económico de la Federación Española tuvimos que renunciar a celebrar una de las pruebas de la liga nacional por el estado del velódromo”, lamenta Marquina.

Según detalla el informe técnico, la pista del velódromo tiene grietas, así como una superficie abrasiva por la granulación del acabado superficial, que supone un riesgo en caso de caída. También presenta discontinuidades en la superficie de rodadura, con agujeros en todo el perímetro. Además, en algunas zonas la vegetación se ha abierto paso a través del cemento e interrumpe la continuidad de la pista.

Junto a estas deficiencias, el velódromo sufre aluminosis, una lesión del hormigón por la que va perdiendo propiedades y pone en riesgo la estabilidad de la construcción.

Quienes más sufren a día de hoy estas precarias condiciones son alrededor de cien niños y jóvenes de dos clubes, la Escuela Ciclista de Zaragoza y el Club Ciclista Iberia, que entrenan cada semana en dichas instalaciones. “Es deprimente que intentes levantar actividades deportivas y no tengas los medios para poder avanzar”, asegura Santi Iranzo, presidente del CC Iberia, quien añade que “lo que hacemos ahora, a modo de juego, es poner obstáculos para que los niños no tengan acceso a las zonas dañadas. Para ellos es divertido, pero si cogieran algún agujero se podrían hacer mucho daño”. 

Por su parte, Sergio Larrosa es el presidente de la Escuela Ciclista de Zaragoza, que lleva desde 2012 entrenando en el velódromo con niños. “En este tiempo hemos visto cómo se iba deteriorando cada vez más la instalación y lo que se ha arreglado ha sido para peor. Con los pequeños no nos atrevemos a rodar en la pista. El año pasado hubo cuatro caídas que derivaron en lesiones importantes por las condiciones”.

La FAC denuncia esta situación y lamenta que, mientras que en toda Europa se está invirtiendo en este tipo de instalaciones, Aragón se está quedando atrás. “Queremos que el ciclismo aragonés siga creciendo en todas sus disciplinas, pero, con un velódromo así, la de pista no se puede desarrollar”, manifiesta Marquina. Siguiendo el ejemplo de muchos velódromos europeos, en los planes de la Territorial también está disponer de un Circuito Escuela alrededor de la instalación. Sería como una carretera donde practicar ciclismo seguro y donde tendrían cabida tanto niños como adultos.

Fotos: Federación Aragonesa de Ciclismo

No hay comentarios:

Publicar un comentario