Termina la concentración pre-Europeo de Galapagar y la conclusión es evidente: Vuelve, Juan, vuelve pronto, a ver si puedes enderezar esto

Mañana termina la concentración de las selecciones junior y sub23 masculina en Galapagar de cara a determinar los ciclistas que participarán en el inminente Europeo de Anadia. Un ‘stage’ que, lejos de ofrecer unos “entrenamientos de calidad”, como se asegura desde la propaganda federativa, ha sido en su mayor parte lo que se conoce en el argot ciclista como ‘mundialito’: una serie de tests cronometrados para decidir, en teoría, a quien llevar y a quien no, a elegir a los más fuertes, que no a los mejores,… lo que puede llegar a quemar a los corredores a una semana del objetivo en el que deben dar el máximo.

Oliver, en una concentración anterior en Galapagar, a finales de 2021

La historia del ciclismo en pista español está llena de ‘mundialitos’ y de sus consiguientes fracasos. Y es una lástima que se vuelva a estos criterios que parecían olvidados. Habían comenzado a cambiar las cosas, tímidamente, con Juan Martínez Oliver, con los mismos escasos medios humanos de siempre, aunque haya más dinero, pero generando ilusión entre algunos. Se tenía la oportunidad de preparar los grandes objetivos juniors de una forma diferente, desde unas referencias bastante claras del Campeonato de España, trabajando sobre todo en la preparación técnica. Pero la baja médica y ausencia posterior del técnico almeriense ha cambiado sensiblemente el decorado y junto a los seleccionadores interinos -que bastante están haciendo- ha tomado más protagonismo un equipo de rendimiento cuya asincronía con lo que es la realidad de la pista es cada día más evidente. Y preocupante, algo de lo que ya se dan cuenta no sólo técnicos y preparadores, sino los propios ciclistas, que cada vez comprenden menos de lo que sucede, como se ha visto en las últimas actividades, no sólo estos días en Galapagar.

Y decíamos 'en teoría' cuando hablábamos del ‘mundialito’ como elemento de selección, a tenor de lo sucedido con dos de los chavales concentrados estos días, el madrileño Álvaro Navas y el valenciano Alejandro Merenciano, los que no viajarán a Portugal. Si el motivo hubiera sido el resultado de esos tests, podría sostenerse la decisión, aunque no se estuviera de acuerdo: son dos de los mejores persecucionistas presentes y nos llevan diciendo mucho tiempo que las cuartetas iban a ser la prioridad según el dogma federativo. Pero la razón por la que no viajan es más simple, porque no se les inscribió previamente: la fecha tope para ese requisito era el domingo 3 a las doce de la noche… y la concentración empezó dos días después.

Alejandro Merenciano, uno de los afectados. Foto: FPC

Es decir, se había tomado ya la decisión de que Mario Anguela, Ibai Azanza Beñat Garaiar, José Segura y Urko Vidal, junto con el velocista Unai Díez fuesen los que acudieran a Anadia. Antes de la concentración. Por lo tanto, a Navas y a Merenciano se les llamó para nada. En el mejor de los casos, un gasto innecesario; en el peor, un varapalo en su carrera. Afortunadamente son jóvenes, no se hunden incluso con desengaños como estos y la perspectiva de poder correr el Campeonato de España absoluto en septiembre les ha devuelto la ilusión, cuando lo fácil sería mandar a la selección y al ciclismo en pista a freír espárragos. Por cierto, ¿qué hubiera pasado si Azanza, en Anadia o cualquiera de estos corredores en Galapagar hubieran sufrido un percance? La UEC posiblemente hubiera permitido el cambio al ser una lesión, pero obligando a una burocracia innecesaria: Con lo fácil que es inscribir a una ristra de ciclistas, como ha pasado con los sub23, y luego hacer los descartes.

Y ya que hablamos de ellos, en esta categoría los elegidos son, a falta del anuncio oficial, Francesc Bennassar, Iker Bonillo, Marcel Pallarés, Alberto Pérez, Jaime Romero y Marc Terrasa, junto al velocista Ekain Jiménez, siendo los descartados Eder Moreno y Telmo Semperena. También habría mucho que comentar sobre esta selección, sobre las presencias y los descartes… pero no es el tema de hoy.

Soñar con estructuras profesionalizadas, con cambios y, claro está, con dimisiones es una utopía, pero por pedir que no quede. Mientras tanto, nos consolamos con un deseo: Vuelve, Juan, vuelve pronto, a ver si puedes enderezar esto.

7 comentarios:

  1. Uno de los grandes problemas q estoy detectando (aunque no es algo nuevo) es la inclusión en el apartado de responsables de rendimiento que demuestran un total desconocimiento de lo que es este deporte, lo cual queda muy reflejado en la programación de algunos entrenamientos, con alguna que otra aberración que es totalmente inasumible a la práctica, a no ser que hayamos descubierto "la pólvora" de repente en España diferenciándonos totalmente de lo que se está haciendo a nivel mundial con el resto de países punteros del ciclismo en pista.
    Lógicamente, esto conlleva a problemas con los técnicos especializados y con experiencia en nuestro deporte.
    Siempre he dicho que los conocimientos son indispensables y la programación de los entrenamientos tienes que estar avalada por la ciencia, pero he podido comprobar a lo largo mis más de 30 años en este mundo que un licenciado en INEF (ahora llamado CAFE) sin experiencia en pista, no sabe programar un entrenamiento a la práctica de un corredor especialista en pista pese a tener muy claros los conceptos de los principios del entrenamiento deportivo, exactamente igual ocurre en el trabajo de fuerza en el gimnasio a la hora de ejecutar los ejercicios o aplicar la kinesiología a éstos.
    Me sabe mal y no quiero que sea una crítica hacia ellos, porque posiblemente tampoco ellos tengan la culpa, pero por desgracia lo he podido comprobar y sufrir bastantes veces...

    José Antonio Escuredo Raimóndez

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  2. Coincido plenamente. Pero cuando llegas a su sitio, o te poner en sintonía con los que saben, o tienes que ser honesto y marcharte.

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    1. El problema viene de la anterior concertación , cuando se realizan test TP con dos cuartetas A y B, ahí estaba el responsable de rendimiento avalado por Otro responsable Max Revolucionando todo … salieron de ahí con la lista realizada.

      PD: de ahí también salió de la noche a la mañana una competición para en Alemania 🇩🇪.

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    2. Si es alguien humilde y con ganas d sumar, no d restar, escuchará a los q tienen experiencia y con los años se juntarán los conocimientos y la experiencia acumulada, con lo cual pueden llegar a ser excelentes entrenadores, el problema es q no saben aplicar la toría a la práctica específica de cada deporte, eso es lo complicado, porq cada deporte tiene sus particularidades específicas.

      José A. Escuredo Raimóndez

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    3. Yo he llegado a ver cosas muy heavy, tanto como corredor como ya de entrenador y no por un recién salido de su carrera de INEF, por gente ya con un cierto prestigio y recorrido, por ejemplo hacer trabajos de fuerza en rodillos de rulos, un poco complicado no? O entrenamientos que por el volumen e intensidad son inviables de acabar, eso lo sabe cualquiera que haya hecho ese entrenamiento con anterioridad, volvemos al problema de que el papel lo aguanta todo y a la hora de diseñar un entrenamiento si no sabes la fatiga que supone el llevarlo a cabo puedes meter la gamba espectacularmente como he visto en el pasado y en la actualidad.

      J.A. ESCUREDO

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    4. Escuredo: estoy seguro que ahora estos nuevos técnicos miden el CTL en las pruebas de velocidad ..! Posiblemente sea un gran factor jajaja

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  3. CTL, FTP...son valores que por ejemplo en las pruebas puras de velocidad tienen poca relevancia y aplicación, pasa algo parecido con los vatios, está bien conocer nuestra potencia máxima como información, pero nos sirve de poco a la hora de planificar los entrenamientos, en velocidad todo es a tope señores, no podemos estar mirando vatios, exceptuando algunas series lácticas o de fuerza-resistencia en momentos puntuales de la temporada, la mayor parte es al maximo, ya miraremos después los vatios alcanzados, jaja

    J. A. Escuredo

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