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| Kröger y Brennauer, en su despedida. Foto: UEC |
Con ocho medallas de oro, cuatro de plata y una de
bronce, Alemania se ha impuesto en el medallero de los Campeonatos de
Europa de pista élite 2022, celebrados durante seis días en el velódromo de la Feria
de Múnich. Un recinto portátil construido para la ocasión, del que se temía
su cuerda de 200 metros por peligrosa, pero que en ningún momento lo fue,
al menos para los velocistas, que sí tuvieron que cambiar su forma de correr. Curiosamente
los dos accidentes más graves se produjeron en pruebas femeninas de fondo,
y cuyas consecuencias, en forma de larguísimo parón en el programa, deberían
estudiarse por lo que afecta a la competición y a la retransmisión.
222 ciclistas (122 hombres y 100 mujeres) de 27 países
compitieron en la prueba que forma parte del Campeonato de Europa
multideportivo con nueve disciplinas y del que no se sabe su futuro, aunque
sí se volvió a lograr incrementar el interés aislado de los deportes que lo
componen.
Tras Alemania, se clasificaron en el medallero Francia, con
un total de 15 medallas (6, 5 y 4) e Italia que finalizó con 3 preseas
de oro, 5 de plata y 3 de bronce. El resto de los países participantes
terminaba más distanciado en cantidad, con España en el puesto duodécimo, y
último, del medallero, con ese bronce solitario de Sebastián Mora.
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| Vigier, doble campeón en velocidad y keirin. Foto: UEC |
Alemania volvió a sustentar su dominio en la velocidad femenina.
Emma Hinze no pudo conseguir su cuarta medalla, tras las dos velocidades
y el 500 metros -una prueba en la que debutaba al más alto nivel-, al no salir
en el keirin, enferma, pero la campeona del mundo Lea-Sophie Friedrich cogió
el testigo. La cuarteta de persecución, y una de sus corredoras Mieke
Kröger -que dejó a Lisa Brennauer sin el oro en su despedida- volvieron a
apoyar en esos logros, con los dos últimos oros masculinos, el del persecucionista
Nicolas Heinrich, el único dos veces por debajo de 4:10, y el de la dupla
Mike Kluge-Theo Reinhard, impresionante en la madison.
Con Países Bajos brillando esta vez solamente en la
velocidad por equipos masculina, por su ausencia en las individuales, Francia
tomó el relevo en las cortas, con ese doblete de Sebastién Vigier, que le sitúa
en el escalafón a continuación de los neerlandeses, y el oro de Melvin
Laderneau en el kilómetro, que ha dado otro salto de calidad.
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Barbieri, dos oros 'in extremis', el de la madison con Zanardi.
Foto: UEC |
Francia volvió a demostrar que su cuarteta de persecución
va a ser una referencia en este ciclo olímpico y las otros dos oros
individuales estuvieron caracterizados por una espectacularidad que acompañó a
muchas de las victorias en Múnich: sin necesidad de extendernos demasiado: Benjamin
Thomas, como ‘capo’ en la puntuación y Donavan Grondin, en el ómnium,
con ese ajustadísimo final; Elia Viviani en esa histórica eliminación,
tras haber corrido en carretera por la mañana, con Rachele Barbieri increíble,
tanto en el ómnium como en la madison junto a Silvia Zanardi, Iuri Leitao y
su doble ‘bonus’ o Anita Yvonne Stenberg, haciendo gala de su
potencia, ambos en el scratch; o Lotte Kopercky con su doblete,
eliminación-puntuación.
Para España, una actuación al nivel de los últimostiempos, incluso con un paso atrás en determinados aspectos, eso sí, con muchísimos
más medios, aunque se quiera dar una impresión de avance desde la propaganda
federativa. Pero ya incidiremos en estos aspectos.
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