La 'campana electrónica' llegó el sábado a los velódromos españoles

Posiblemente algun corredor se sorprendería el pasado sábado en la manga de la Copa de España de pista en el velódromo de Tafalla cuando estaba a punto de iniciar la última vuelta de la clasificatoria de velocidad, al no oir la tradicional campana.

En su lugar, lo que pudieron escuchar fue una grabación digital del sonido de la propia campana, en lo que ha sido la primera vez que se probaba un sistema similar en nuestro país, pero que ya se ha empleado en otros lugares.

Fue una de las diversas mejoras tecnológicas que presentó Edosof, es decir, Ernesto Domenech, en este evento, combinada con un cuentavueltas electrónico -tampoco muy habitual en nuestro país- que posibilita realizar la misma tarea, pero con mayor comodidad para el comisario encargado de esa labor, muchas veces minusvalorada, pero de vital importancia.

Una grabación de cuatro segundos, más que suficiente para avisar a los corredores, aunque se puede aumentar la duración, y que es básicamente el mismo sonido que la campana, aunque con la velocidad ligeramente modificada.

La prueba fue satisfactoria, aunque en las competiciones de pelotón se volvió al sistema tradicional de campana debido al alto ‘volumen’ del sonido ambiente en el velódromo.

De cara al futuro, Domenech quiere seguir trabajando en el sonido de la misma, incrementando el volumen y ‘agudizando’ el tono para que sea aún más audible y lo que fue una prueba se convierta en una costumbre. Y aunque alguno diga que la campana nunca fallará, no son infrecuentes las ‘averías’ de este instrumento al descolgarse de su soporte o simplemente soltarse el badajo. Y la solución, aunque sencilla, no deja de ser incómoda.

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