Cinco años de la declaración oficial de la pandemia de Covid-19, que paralizó el mundo -en este caso el de la pista- y lo puso patas arriba

Hoy se cumplen justo cinco años del reconocimiento por parte de la OMS como pandemia del brote de coronavirus surgido en Wuhan, China, al haberse extendido ya por un centenar de países, en una propagación desconocida que llevó a finales de ese mismo mes a tener detectados más de medio millón de casos a nivel mundial. Ese 11 de marzo de 2020, se sabía muy poco de la forma real del contagio, pero sí de los graves e incluso mortales efectos que podía tener sobre personas con las defensas disminuidas, o incluso en perfectas condiciones de salud, al no existir ningún tipo de prevención ni de tratamiento efectivo. Por ello se impusieron todo tipo de medidas sobre restricciones de viajes o cancelación de eventos multitudinarios, con medidas de confinamiento, cierre de establecimientos no esenciales o aislamiento social y uso de mascarillas, gel hidroalcohólico e incluso guantes.

Escultura de Coronavirus. Eduardo Ruiz Mondragón
Trabajo propio, CC BY SA 4.0, 

Los primeros casos se habían producido en diciembre de 2019 en China, y en enero ya se había detectado el genoma secuenciado, para llamarse oficialmente Covid-19 desde el 11 de febrero, cuando ya era una emergencia sanitaria mundial. Por aquellos días -concretamente a finales de mes- iba a celebrarse el Mundial de pista en Berlín, aunque no había especiales señales de alarma en este evento. Sí, en cambio, en el Tour UAE, donde se dijo que se habían detectado dos casos entre el pelotón ciclista de la prueba -aunque los dos auxiliares que causaron la alarma no tenían dicha enfermedad-. Lo cierto es que la carrera fue suspendida dos días antes de lo previsto y que los ciclistas participantes fueron puestos en una semi cuarentena que les impidió salir inmediatamente del país como todos deseaban.

Michael Mørkøv era uno de ellos, aunque pudo viajar hasta Berlín ya que se había retirado unos días antes. Y aunque dio negativo en los incipientes tests, como medida de precaución se le mantuvo en una habitación aislado, aunque nada de ello afectó a su rendimiento ya que se proclamó campeón del mundo de madison. Peor le fueron las cosas a Albert Torres, que no pudo llegar hasta la capital alemana hasta la misma mañana de la americana y lógicamente todo ello afectó a su rendimiento para terminar en una anónima décima plaza. Era lo de menos, ya que España estaba clasificada en esta prueba y en el ómnium para los Juegos Olímpicos que iban a tener lugar poco más de cinco meses después… aunque como de todos es sabido no fuera así.

La verdadera alarma en el mundo ciclista comenzó a propagarse días después. A nivel nacional, las pruebas de la Liga de Pista que restaban por disputarse en Palma de Mallorca, Daimiel o Valladolid eran suspendidas en los primeros días de marzo, y comenzaron a anunciarse los primeros cierres de velódromos para todo tipo de actividad. Pero fue el 12 de marzo cuando se anunciaba que el inminente Campeonato de España junior y cadete quedaba suspendido. No se disputaría hasta septiembre, ya en pleno calendario escolar y en unas condiciones de aislamiento muy estrictas, quizá demasiado, y que se plasmaron en la negativa a acreditar a medios informativos como TrackPiste (posible y desgraciadamente el único que iba a acudir).

Algunos velódromos estuvieron mucho tiempo abandonados. GROK

Volviendo a marzo, a nivel internacional, el 13 se suspendían los Six Day Manchester el mismo día en que iban a empezar, y poco después, otra de las pruebas de las Six Day Series, la de Brisbane. Una competición que desgraciadamente no tendría continuidad después. También se informaría del aplazamiento del Panamericano y la UEC indicaba la suspensión de todas las pruebas hasta el 1 de junio.

También fue motivo de un intenso debate la celebración de los Juegos Olímpicos, aunque la prueba test, Ready Steady Tokyo, fue rápidamente cancelada. Federaciones como la KNWU comenzaban a pedir el aplazamiento olímpico, aunque la posición más beligerante era la de GlobalAthlete… hasta que Canadá decidió que, pasase lo que pasase, no enviaría equipo ni a los JJ OO ni a los JJ PP, y Estados Unidos pidió directamente el aplazamiento.

El 22 de marzo el COI se dio un plazo de cuatro semanas para decidir, aunque pocos días más tarde oficializaba que quedaban aplazados “a una fecha no posterior al verano de 2021”, para anunciarse el 30 que se celebrarían justo un año más tarde. Una decisión que le vino bien a alguna selecciones y corredores para mejorar su preparación, pero que también conllevó a la retirada prematura de algunos pistards, como las australianas Amy Cure y Stephanie Morton o el neozelandés Edward Dawkins. Por cierto, en aquellos días conocíamos el fallecimiento de Daniel Yuste, posiblemente con ese triste honor de ser el primer deportista olímpico muerto por Covid.

Las mascarillas, a la orden del día. Incluso en algunos lugares
se quisieron imponer a los corredores en competición. GROK

Poco a poco se fue volviendo la normalidad, con la implantación de medidas higiénicas y preventivas, sobre todo la ‘distancia de seguridad’, que en muchos casos supuso competiciones a puerta cerrada, hasta que llegaron las primeras vacunas a finales de año. El Europeo junior y sub23 pudo salvarse gracias a la actuación de la FCI y a que se disputase en un velódromo descubierto: no pudo ser Forlí como se barajó en un principio, sino en el Attilio Pavesi de Fiorenzuola d’Arda, del 8 al 12 de octubre, un mes poco habitual para este evento.

Más tarde aún, a principios de noviembre, tuvo lugar el Europeo absoluto, en Plovdiv (Bulgaria), en un Kolodrum que había sido hasta unas semanas antes un hospital de campaña, aunque países como Alemania, Bélgica, Dinamarca, Francia, Irlanda y Países Bajos renunciaron al mismo por las reticencias ante la situación sanitaria en aquel país.

Por el contrario, el Mundial junior no se disputaría ese año, aunque El Cairo retomaría su organización en 2021, año en el que aún habría muchas medidas de control, ya en forma de vacunación o tests de antígenos y PCRs. Cinco años después, y gracias a las vacunas -le pese a quien le pese- la pandemia es simplemente un mal recuerdo, y el Covid-19, algo muy similar a una gripe, aunque en su momento cambió profundamente el mundo que conocíamos, por mucho que alguna insensata dijera hace pocos días que no tuvo gravedad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario